En Colombia, la construcción sostenible está tomando gran relevancia, especialmente en regiones en constante desarrollo urbano. Cada vez más empresas constructoras implementan prácticas ecoeficientes en viviendas, edificios corporativos, instituciones educativas y proyectos de infraestructura. Estas iniciativas no solo cumplen con estándares internacionales, sino que también aportan al bienestar de los habitantes, generando entornos más confortables y reduciendo costos operativos a futuro.